08/11/2021
Entrevista de Óscar Rodríguez para Grupo Duplex.
«¿Es la actual normativa clara y precisa?; ¿Se aplica la normativa de forma homogénea en todo el territorio del Estado?; ¿Los laboratorios de metales preciosos (públicos y privados) mantiene los mismos criterios a la hora de aplicar el contraste de garantía en los objetos fabricados con metales preciosos? «.
Tras la celebración del II Congreso Nacional de Joyería en Córdoba, entrevistamos a Oscar Rodríguez, Vicepresidente de la Confederación de Joyería en España. Oscar nos cuenta la necesidad de celebrar este congreso, los objetivos marcados y cómo estos se han cumplido, así como las necesidades que el sector necesita cubrir.
¿Cuál es la valoración que nos puede hacer tras el II Congreso Nacional de Joyería en Córdoba?
Tanto en la Federación gallega de joyeros como en la Confederación se ha valorado muy positivamente este II Congreso. Aun cuando solo fuese para poner fin a 30 años de silencio de la Joyería de España ya habría valido la pena. Creemos que era una necesidad muy sentida por los profesionales y a pesar de las dificultades que impuso la pandemia, gracias a las nuevas tecnologías, se han alcanzado con creces los tres objetivos propuestos como esenciales:
– Hacer una llamada de atención a la participación de las empresas del sector joyero, que en gran medida han estado encerradas en sí mismas durante estos años de grave crisis.
– Abrir un espacio de debate, de reflexión, público y transparente sobre los problemas que nos preocupan a los profesionales del sector, en el que todos nos sintamos libres de participar en igualdad.
– Trasladar al Ministerio de Industria y a las administraciones públicas en general (ante las que el sector ha estado ausente durante años), el mensaje de que el sector está vivo, participarles cuáles son las preocupaciones de la joyería de España hoy.
En relación con esta situación, creo que fueron suficientemente ilustrativas las palabras del representante del Ministerio de Industria Ramón Herrero al afirmar que en los más de nueve años que llevaba en esa responsabilidad en el Ministerio no habían tenido noticias del sector joyero.
La afluencia presencial fue relativamente escasa para un evento de este calado. ¿Cómo se puede aglutinar al conjunto del sector en torno a temas que realmente le interesan?
Éramos conscientes de que la presencia física iba a ser reducida, pues no solo estamos en un momento económicamente difícil, sino, además aún estamos en plena pandemia y todo ello pesa mucho, pero estamos muy satisfechos con la participación, en especial vía extreaming.
¿Por qué han considerado necesario constituir la Confederación de la Joyería de España?
La crisis no solo se llevó por delante a cientos de empresas del sector y ha dejado tocados a otras muchas, sino también a las asociaciones que las aglutinaban y representaban. Son pocas las provincias y comunidades que cuentan a día de hoy con una organización empresarial del sector joyero en funcionamiento.
También en el plano estatal el sector estaba necesitado de una voz plural, sin ataduras a nada ni a nadie, que pueda recoger el sentir de todos los operadores grandes y no tan grandes, fabricantes y artesanos, minoristas y mayoristas, importadores, laboratorios, etc., una voz con la que se sientan identificados y representados todos los profesionales, que se deje oír y que rompa este silencio de años de la Joyería española, a ello esta llamada la Confederación.
No podemos dejar de lado la controversia generada desde la AEJPR, pero, al mismo tiempo, tal y como indicaba el representante del Ministerio el Sector debe generar una respuesta común para actuar con fuerza ante las Administraciones. ¿Hay alguna puerta abierta al entendimiento?
Por supuesto, siempre dispuestos a escuchar propuestas. En la Confederación dedicamos todo nuestro tiempo y esfuerzo, que nunca es suficiente, a tratar de resolver los problemas del sector, no vamos a entrar en debates estériles sobre la representación, primero porque no aspiramos a monopolizar la representación de la joyería española, segundo porque los empresarios del sector ya sabemos quién es quién y somos lo suficientemente mayores para saber lo que nos conviene. En todo caso hace tiempo que no comprendemos y desde luego no compartimos determinadas manifestaciones, en particular en cuanto caen en el intento de descalificación personal o en la búsqueda del enfrentamiento, pues nada aportan al sector ni a la solución de nuestros problemas.
Nuestro objetivo inmediato es doble, diagnosticar cuales son los problemas más relevantes y consensuar, con el apoyo de la mayoría, una propuesta de solución que conjuguen los intereses de los distintos operadores (fabricantes, comerciantes al mayor o al por menor, importadores, artesanos, laboratorios, proveedores de metal…) para elevarla a las administraciones competentes.
A su criterio, ¿es necesario modificar la normativa que regula la fabricación con metales preciosos?.
Desde la Confederación, más de 30 años después de la publicación de esta normativa, hemos considerado que era momento de abrir un debate y promover una reflexión abierta del sector sobre esta cuestión. Tanto en el ámbito estatal como comunitario. Y para ello nos hemos hecho las siguientes preguntas:
La respuesta, que ya era conocida de la gran mayoría de los profesionales del sector, parece clara y es no, y no solo lo decimos nosotros, sino que también lo afirma la Sala de la Audiencia Nacional, en la resolución del recurso interpuesto contra el Auto 128/2020, de todos conocido, del que resulta que esta normativa no solo no es clara ni precisa, sino que no se aplica de forma homogénea y uniforme en todo el territorio del Estado y desde luego tampoco por todos los laboratorios.
A nadie se le escapa que es necesario y este es uno de los objetivos de la Confederación trabajar para que la normativa:
– recupere su finalidad principal que es dar seguridad jurídica a fabricantes, comerciantes y en especial a los consumidores,
– incorpore las nuevas técnicas disponibles para el marcado de contraste (como el gravado por láser u otros).
– de respuesta a las nuevas formas de elaboración y fabricación, solventando cualquier zona de duda o posibilidad de confusión a la hora de su aplicación por los fabricantes e importadores y en especial por los laboratorios.
En todo caso, a nuestro criterio, cualquier cambio de esta, aun siendo necesario, requiere de un debate, de una reflexión previa en no solo el seno de la Confederación, sino por parte de todos los operadores del sector, que debería de culminar con una toma de posición y elevando una propuesta al Ministerio respaldada por la mayoría.
En todo caso, tras escuchar el interés generado en las ponencias, ¿se está preparando algún documento u ‘Hoja de Ruta’ para seguir abordando las cuestiones tratadas (Ley de Metales, Comercialización, Sostenibilidad, Formación, Internacionalización…)?
A nadie se le escapa que estas ponencias son fruto, no solo, de una primera reflexión entre los cientos de empresas que integran las asociaciones que componen la Confederación (los profesionales de La Coruña, de Pontevedra, de Córdoba, de Lugo, de Madrid, de Oviedo, de Orense, de Gijón), sino también de otros puntos de España (como Valencia, Cataluña, Extremadura, etc..), oídas sus opiniones decidimos abordar y priorizar en el Congreso un ramillete de temas entre los que destacaría: la normativa de metales, la formación, la transición digital, el medioambiente y responsabilidad social en joyería.
Concluido el Congreso ha llegado el momento de analizar las conclusiones alcanzadas y elaborar un documento que someteremos a una nueva ronda de debate en mesas de trabajo territoriales representativas de los diversos subsectores, proceso que debería de concluir con un conjunto de propuestas que, con la aquiescencia de la mayoría del sector, puedan enviarse a las administraciones públicas competentes.
Además de los temas tratados en el Congreso, a su criterio ¿qué cuestiones son las que más preocupan hoy a los empresarios del sector?.
Creo que todos coincidimos en que en estos momentos a la mayoría de los profesionales del sector joyero les preocupa y está sobre la mesa: mejorar la regulación de los objetos fabricados con metales preciosos, tanto en el mercado interior español como en el mercado único europeo, en donde es necesaria una armonización normativa. Dignificar la profesión que pasa por mejorar y adecuar la formación de los trabajadores y profesionales del sector a la nueva realidad. Potenciar la presencia de los profesionales en las asociaciones, y sobre todo, solventar los problemas que implica el relevo generacional en un momento de cambio vertiginoso como el actual, en el que todo está en crisis y parece requerir un nuevo modelo de empresario, un nuevo modelo de empresa, una nueva dimensión, nuevas formas de comercio.
